Barro, tierra, fango… Seguro que no puedes imaginar los numerosos usos que ha tenido y tiene este mineral para los seres humanos ???

En la antigüedad los pueblos ya plasmaban a sus divinidades en arcilla y pronto empezaron a utilizarla para sanar su propio cuerpo.

Empezaron a curar las heridas y a embadurnar las partes doloridas con ella, iniciándose así en el conocimiento sobre un producto sencillo que resultaría ser un remedio potente y eficaz.

Más tarde las explicaciones científicas iniciaron la propagación de las verdaderas propiedades benéficas de la arcilla.

Análisis científicos precisos han revelado las características más profundas de este material complejo y vivo, que se formó durante un proceso de millones de años y que llevó a concentrar, en una misma estructura, una enorme cantidad de minerales y de residuos orgánicos, y que por su estructura física estratificada, permite extraer de las superficies sustancias dañinas, proporcionando a su vez, los elementos beneficiosos contenidos en ella.

Este proceso es conocido en el mundo científico como capacidad de intercambio catiónico, por lo que cuando la arcilla entra en contacto con nuestro cuerpo absorbe toxinas y bacterias, cediendo oligoelementos útiles a nuestro organismo.

Y esto hace de este mineral aparentemente tan insignificante, un potente remedio por sus propiedades terapéuticas únicas.

Son sus múltiples propiedades curativas las que más me han sorprendido. ¿Arcilla para curar enfermedades? ¡Pues sí!

La arcilla

La geoterapia o el uso de tierras con fines terapéuticos es una práctica muy extendida en la actualidad. Destaca por sus propiedades antiácidas, cicatrizantes, absorbentes y reguladoras de la temperatura.

Pero no es cualquier arcilla la que puedes emplear como tratamiento. Las arcillas para fines curativos vienen irradiadas al sol, descontaminadas de gérmenes y materia orgánica y bien pulverizadas.

Los diferentes tipos que existen se diferencian en la proporción de sus componentes. Por lo tanto, es recomendable consultar a un especialista para elegir la más adecuada. Aquí te presento la que yo estoy utilizando, porque es la que mejor me venía ahora para la patología que me estoy tratando.

Debido a una alergia al cambio de estación, que tendrá mucho que ver también mi estado emocional, lo cual ya estoy tratando también con ciertas visualizaciones y he mejorado mucho. Tengo un poco de estrés tras una semana de mudanza y con ello muchos cambios.

Eso ha derivado en una traqueobronquitis, que es una inflamación de la traquea y los bronquios principales, asociada a una infección en el tracto respiratorio. Para solucionar el problemilla he estado aplicando arcilla verde (como veis en la foto) dos veces al dia durante 7 días y me encuentro muy bien aunque sigo teniendo efectos de congestión por la alergia. Para eso estoy tomando sol de oro, de esto ya hablo en otro post dedicado a la alergia, si así os interesa.

Yo la he usado como antiinflamatoria y me ha desaparecido la tos y el dolor.

Tiene múltiples usos y propiedades:

Es un potente remedio contra el dolor; es antiinflamatoria, alcalina y desinfectante de los tejidos. Cicatriza, remineraliza, depura, reequilibra y refuerza. La arcilla puede ser utilizada por vía interna y para aplicaciones externas, desarrollando una acción remineralizante, antitóxica, reequilibrante y absorbente, en especial por su capacidad de intercambio iónico que le permite, a través de un proceso osmótico, extraer toxinas hidrosolubles y al mismo tiempo proporcionar a los tejidos un gran número de minerales.

Por su enorme capacidad de soltar pequeñas dosis de energía electromagnética (generada durante su exposición al sol, al aire y al agua), regenera y activa el potencial energético, haciendo de catalizador en los procesos biológicos.

Por otra parte, la gran cantidad de silicio contenido en ella, la hacen particularmente útil en caso de anemias, cansancio crónico y debilidad.

Así, la arcilla destaca por sus propiedades:

  • Antiséptica y bactericida. Por su constitución, es capaz de contrarrestar la actividad de las bacterias, creando un ambiente hostil a la proliferación bacteriana sin provocar ningún daño al organismo y sin impedir la regeneración celular. Es eficaz en varias formas infecciosas (colitis, enteritis, infecciones pulmonares, llagas purulentas…).
  • Antiinflamatoria y antidolor. Debido a su capacidad termoabsorbente, reduce las inflamaciones. Es muy útil en caso de quemaduras, distorsiones y contusiones. Absorbe el calor y el dolor.
  • Remineralizante. Su finísima granulometría hace que la liberación de los minerales que la componen produzca una verdadera acción de remineralización del organismo. Es muy útil en las molestias articulares, en caso de fracturas, osteoporosis y en las anemias.
  • Absorbente y antitóxica. Su constitución micromolecular le permite la absorción de enorme cantidad de agua, gas, toxinas y venenos, especialmente en virtud de su particular capacidad de intercambio iónico.
  • Es un excelente remedio contra la aerofagia y en caso de envenenamiento por sustancias tóxicas. Combate la retención hídrica, absorbiendo los líquidos y las impurezas del metabolismo.
  • Es muy útil para eliminar los parásitos intestinales y para restablecer el equilibrio de la flora microbiana dañada por enteritis, colitis y colibacilosis.
  • Cicatrizante. Estimula los factores de coagulación de la sangre y acelera los procesos regenerativos de los tejidos como biocatalizador del organismo, favoreciendo reacciones químicas, tales como la coagulación de la sangre y la regeneración de la piel. Estas propiedades se usan para curar heridas externas y la úlcera gastroduodenal.
  • Alcalinizante. Su gran cantidad de elementos básicos proporciona un medio alcalino al organismo.
  • Energizante. Por su complejo sistema de minerales, regenera la actividad orgánica y aporta energía. Por ejemplo, el elevado contenido de calcio fortifica los tejidos elásticos, y el magnesio es de gran ayuda en caso de astenia intelectual y muscular.

Las variedades de arcilla

Las arcillas disponibles en el mercado para fines curativos se diferencian por los colores (verde, blanca, roja, amarilla, gris, azul, beige). Esta variedad se debe a la composición química, a la antigüedad de la misma en los yacimientos de extracción y a la localización de éstos.

Las que yo suelo utilizar son la verde y la blanca, si nunca se ha usado es mejor empezar por la blanca que menos agresiva. A veces puede dar un poco de picor o se puede enrojecer la piel, hacer una pequeña prueba y si esto ocurre retirar y aclarar con agua.

La arcilla verde contiene aproximadamente un 50% de silicio y un 14% de aluminio, y un pH ligeramente alcalino. Tiene propiedades antiinflamatorias muy elevadas y se utiliza en uso externo por su alto poder absorbente, que la hace muy apta para la cura del acné y los ezcemas.

La arcilla blanca es usada mayoritariamente para cosmética. Posee un alto porcentaje de silicio (aprox. un 48%) y más de un 36% de aluminio, lo que le proporciona su característico color. Se la conoce también como caolín.

Es la más fina de todas las arcillas, y es indicada para uso interno: combate las fermentaciones y las intoxicaciones intestinales y regula el tránsito intestinal. La toma de caolín por vía interna es excelente por su capacidad absorbente de bacterias y virus existentes en el sistema digestivo.

También absorbe gases, toxinas y es muy útil en caso de hinchazón o en intoxicaciones alimentarias. Tiene un rol muy importante como protector gástrico, y es de ayuda en caso de acidez, quemazón de estómago, úlceras, regulando dicha acidez y el pH. Es cicatrizante y antiinflamatoria y protege las mucosas.

En uso externo, la arcilla blanca se utiliza sobre todo en cosmética, especialmente para elaborar mascarillas de belleza o como ayuda en casos de estrías de la piel, y sobre todo para envolturas corporales, ya que no contiene hierro o debido a que su contenido en él es muy pobre.

La arcilla blanca purifica la piel y corrige los poros dilatados y es un excelente producto para exfoliar la piel. El caolín es la arcilla más dulce y más apropiada para ésta: su uso externo es indicado para pieles secas, pieles maduras y en caso de cabellos desvitalizados.

Actúa como renovador celular, al ejercer un micropeeling sobre la piel y remineralizar la epidermis. Es perfectamente tolerada incluso por las pieles muy sensibles o intolerantes, y sus virtudes cicatrizantes y antisépticas la hacen preciosa en la cura de las pieles irritadas.

No alergizante, es incluso indicada para la piel de los niños. Los gargarismos de arcilla blanca son un excelente remedio en caso de infecciones bucales, gingivitis o dolor de garganta.

Si tienes alguna duda sobre la aplicación, puedes consultarme o dejarme un comentario.

NAMASTÉ